
El busto de Nefertiti, la mujer más famosa de las 31 dinastías egipcias se descubrió en 1912 durante las excavaciones en el estudio del escultor real Thutmose y se considera uno de los hallazgos más importantes del antiguo Egipto.
Recientemente investigadores del Imaging Science Institute de Berlín, han analizado meticulosamente dicho busto utilizando una técnica no invasiva y herramientas de procesamiento tridimensional y han llegado a la conclusión de que fue esculpido según los cánones estéticos de hace más de 3.300 años y no es fiel a la realidad.
El análisis desveló que debajo del busto había otro rostro delicadamente esculpido en piedra caliza cubierta por capas de estuco, pero con rasgos faciales algo distintos:
- Menos profundidad en las esquinas de los párpados.
- Pliegues alrededor de las esquinas de la boca y las mejillas.
- Pómulos menos prominentes.
- Una ligera prominencia en la nariz.
- Pliegues alrededor de las esquinas de la boca y las mejillas.
- Pómulos menos prominentes.
- Una ligera prominencia en la nariz.