Terminó la campaña electoral, concluyeron los comicios del 9 de marzo y por fin tenemos Presidente para otros cuatro años.
Por fin, ya vimos al candidato ganador dando las gracias. Por fin vimos al resto de candidatos diciendo que los resultados "son mejores de lo previsto". Por fin los vimos a todos en sus balcones, cual oradores en púlpitos. Por fin vimos a sus votantes vitoreándoles desde abajo.
Y digo por fin, porque durante este periodo la programación televisiva se ha visto modificada irremediablemente para todos los ciudadanos.
Entre cara-caras, debates, spots publicitarios, y hasta dibujos animados solicitando el voto, lo cierto es que no había quien encendiera el televisor: las películas brillaban por su ausencia y por supuesto tu serie favorita la habían trasladado a una hora intempestiva y con suerte, como mucho, te ponían un capítulo repetido.
Estoy convencida que esta sensación la deben haber padecido también otros otros muchos ciudadanos como yo, porque leo los resultados de las elecciones, y resulta que:
- Se han abstenido el 24,67% de los electores: 8.332.374.
- Han votado en blanco 1 1,12%: 284.128 personas.
- Han emitido voto nulo 0,64%, esto es 161.970 personas.
8.778.472 personas a las que no les interesan los políticos, ni la política
pero de las que las cadenas de televisión no se han acordado.
1 comentario:
Normal, con esta clase política
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